El extraño sueño de Ana (parte3)

Ya había pasado varios días desde que comenzó el entrenamiento. Y Ana cada día aumentaba su estrés. Los chicos llegaban magullados y cansados. Ana ya se había acostumbrado a su nuevo hogar. Limpiaba y cocinaba, lavaba en un lavadero la ropa sudorosa y lodosa de entrenamiento. Miuhel se habia tomado el tiempo para enseñarle como funcionaban las cosas en ese lugar. Ana extrañaba la tecnología, sus redes sociales y sus amigos virtuales. ¿La extrañarían? ¿Preguntaran por ella? Así que pasaba entretenida en acomodar su nuevo hogar a su gusto y parecer. La energía de la casa era aparentemente solar. Ana no veía conectores ni cables solo apagadores. La cocina estaba conectada a un biodigestor; por lo cual, con los desechos de la casa se alimentaba. La despensa estaba llena a reventar. No había refrigerador, pero por alguna extraña razón los alimentos no se descomponían. Miuhel le habia explicado que la ropa que usaban provenía de el mismo luga...